Estos progres piensan que la historia y la vida es un videojuego. Son como niños.
3 comentarios:
Anónimo
dijo...
Apuesto a que está diseñado para que la pierdas si escoges el lado equivocado... Este verano, en esas largas tardes aburridas, lo probaré y te contaré.
El juego ya lleva tiempo en el mercado. A mi no me parece mala idea la del juego, al igual que hemos podido jugar a juegos de la Segunda Guerra mundial...¿Por qué no este? Al menos así, habrá más de uno que nos dejará tranquilos.
harto, no me extrañaría que tuviera ese sesgo. Aunque yo de video juegos no tengo ni idea. Nunca he jugado más que a las maquinitas de dos botones de los años ochenta.
butzer, sí, yo he visto que la empresa malagueña que desarrolló el juego indica como fecha de lanzamiento el veintitantos de octubre del 2007. Pero hasta ayer no lo vi en mi kiosko. ¿Tendré un kioskero progre que se apunta a la campaña electoral por su cuenta?
Por otro lado, las dos guerras estuvieron bien ganadas: aquí derrotamos al comunismo, en Europa se derrotó al nazismo. Querer cambiar la historia a estas alturas, hacer como que los totalitarismos ganan, es maleducar ideológicamente a nuestros hijos. Por ahí va la cosa.
3 comentarios:
Apuesto a que está diseñado para que la pierdas si escoges el lado equivocado... Este verano, en esas largas tardes aburridas, lo probaré y te contaré.
El juego ya lleva tiempo en el mercado. A mi no me parece mala idea la del juego, al igual que hemos podido jugar a juegos de la Segunda Guerra mundial...¿Por qué no este? Al menos así, habrá más de uno que nos dejará tranquilos.
harto, no me extrañaría que tuviera ese sesgo. Aunque yo de video juegos no tengo ni idea. Nunca he jugado más que a las maquinitas de dos botones de los años ochenta.
butzer, sí, yo he visto que la empresa malagueña que desarrolló el juego indica como fecha de lanzamiento el veintitantos de octubre del 2007. Pero hasta ayer no lo vi en mi kiosko. ¿Tendré un kioskero progre que se apunta a la campaña electoral por su cuenta?
Por otro lado, las dos guerras estuvieron bien ganadas: aquí derrotamos al comunismo, en Europa se derrotó al nazismo. Querer cambiar la historia a estas alturas, hacer como que los totalitarismos ganan, es maleducar ideológicamente a nuestros hijos. Por ahí va la cosa.
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