Mariano Rajoy en la plaza roja de Colón, celebrando los triunfos de Cuatro, de la España futbolística, la única que allí se celebra. Rajoy, enrojeciendo por momentos, conforme crece su contacto con PRISA. Rajoy coloreando su partido político con fútbol y circo. Y pan para unos pocos. Rajoy con barba postiza y nueva ideología, cada vez más rojiza.
Lo que va de Rajoy a Rojoy.
3 comentarios:
Este hombre no tiene sentido del ridículo. Se presta a cualquier cosa con tal de que le perdonen sus pecados.
Pues yo sigo confiando en el PP y en todos y cada uno de sus votantes. El día que deje de hacerlo, habré dejado de confiar en mí.
Un abrazo.
luis, se le ve bajo de forma, por mucho que disimule.
javier, yo también sigo confiando en el pp. En Rajoy, la verdad es que menos.
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