jueves, 8 de enero de 2009


María Teresa en La India

Como una misionera laica, la vicepresidenta viaja con todos sus huesos al paraíso de Krisha. No se deja ni uno, oye. Hare, hare, la vicepresidenta danza y arrea con sus huesos por las calles de Bombay. Mari Tere inaugura fábricas; junta las manos en espitualísimo saludo, como si de una saterdotisa se tratara. Sólo le falta la túnica... Aunque a lo mejor la lleva en la maleta Louis Vuitton... Una Louis Vuitton igualita a la que tengo yo aquí al lado. De ésas que duran toda la vida... El esparto es muy sufrido... Ahora estoy hablando de mi maleta, qué te creías, que de Louis Vuitton no tiene ni la etiqueta pirata. Ay, qué dura es la vida: siempre de aquí para allá, buscando un lugar donde reposen nuestros huesos danzarines y malditos.
Mari Tere en plan danzarina cósmica. En España no pisa una iglesia ni por saber morir, pero los dioses indostánicos son otra cosa. Shiva, Ganesh, Visnú elefantiásico. La diosa Kali moviendo su cintura por los arrabales de Bombay, la madresita María Teresa, imitadora laica de la madre Teresa de Calcuta. Sólo se ha equivocado de ciudad y de religión. Con su osamenta de diseño se pasea entre los parias del mundo. He aquí a vuestra defensora, por si no lo sabíais.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

María Teresa sólo es una pobre extraviada que se ha ido a buscar redención al supermercado Newage Mart. Es tan somera que se cree que puede escupir a los templos aquí y garabatear anjalimudras allá, y que será celebrada por ello. Y tiene razón. Para mil cretinos sus gestos serán valiosos. Ella es miembra señalada del Ejército Estulto, ese al que los españoles siempre pelean por alistarse.
Teresa en India, bowing. Adónde hemos llegado. Krshna debe de estar partiéndose la raja del culo.

Persio dijo...

Krshna (así como lo escribes, sin la i, como si fuera un suspiro) debe ser el único hombre/dios ante el cual Mari Tere se arrodilla :)