Costa recién llegado; aspirante a todo; adlátere del president; colegial con cara de delfín.
Aplicado en los deberes; planchando la camisa; el belfo pijo y alicaído; el discurso diagonal.
Mala leche hirviente; sanguíneo; olvidando la horchata en las venas.
Aghs; extrañado y asqueado; el contratiempo Gürtel; la puñalada en la espalda; aghs.
El breve adiós; el fin de la fiesta. Todo lo quiso y todo lo perdió.
A mí este chico comenzó siéndome levemente repelente. Sin embargo, ahora, en la derrota, ya no. Ayer tuvo un breve acto de coraje rebelándose contra todo un partido. Afirmó: "Un amigo mío (González Pons) dijo que la fiesta se acababa a las 4. Yo estoy de acuerdo con lo que dijo Rajoy: la fiesta no se acaba nunca..." Ayer el chico parecía torero y eterno. Hoy está en el lodo sujetando en una mano su cabeza de turco.
1 comentario:
A mí es que todo el pijerío me supera. Pero para pijos ya está el PSOE.
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