jueves, 3 de diciembre de 2009


La Bolsa de la piratería

De las correrías en el mar a los corredores de comercio:

Sahra Ibrahim, una joven de 22 años, está esperando recibir su “dividendo” en la cola que conduce al local donde la sociedad que asaltó el Alakrana reparte el botín. Sahra aportó un lanzagranadas que le había dejado su ex marido a modo de pensión compensatoria tras el divorcio. Está feliz porque, esa aportación le ha proporcionado “75.000 dólares desde que me hice socia de la operación".
La Bolsa lleva cuatro meses funcionando, “empezamos con 15 compañías marítimas y ya hay 72” afirma Mohamed, antiguo pirata metido a síndico bursátil.

Más

1 comentario:

Nico Castillo dijo...

El Gobierno español sabe como favorecer el consumo y el PIB y la consecución de un "trabajo" que aporte una nómina, la lástima es que solo lo ponga en práctica en paises de la Alianza de Civilizaciones (inventada por Zapatero) como Somalia o Mauritania.

Mientras en España, ya lo sabéis, cinco millones de desempleados, un millón de familias con todos sus integrantes en el paro, millón y medio sin recursos...

Dan ganas de llorar.

Saludos Anti ZP