lunes, 11 de diciembre de 2006


Huelga de sangre y candidez nacional



Recién llegado de Transilvania, el Conde acusa a los demás de buscar la sangre: algunos están esperando que haya muertos… El Conde, antiguo fiscal general, ahora es el abogado del diablo y pide menos pena para De Juana. El Conde, crédulo y cándido, creía en su huelga de hambre. No contaba el jamón de York como alimento. Eso no llena. El chantaje alimenticio del terrorista falsamente desnutrido. Es que el Conde es benéfico: busca la pazzz en la sociedad a través de la aplicación flexxxible de la ley. La ley se deshilvana. El Conde empalador ha dejado de ser inflexible. El Conde, antiguo fiscal general, ahora es el abogado de una Eta en huelga de sangre. Cuando se termine la huelga, volverá la sangre. Y frente a la huelga de sangre de Eta, la candidez nacional.

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